Soy Borja Larragán.
Soy Borja Larragán, exjugador profesional de baloncesto y mentor personal y deportivo.
En el deporte de alto rendimiento, me he enfrentado a retos que han puesto mi cuerpo a prueba, un cuerpo
entrenado para ello.
Pero para lo que no te preparan siempre es para el desafío psicológico. La presión, las lesiones o incluso
la reinvención tras terminar tu carrera profesional deportiva.
Hoy, dedico todos mis esfuerzos a cuidar de la mente de aquellos que viven o están por vivir experiencias
que conozco en primera persona.
“He llegado hasta aquí, hasta hoy, por todo lo que he vivido, pero también por todo lo que he trabajado en vivir”
Un poco sobre mí
Mi carrera comenzó en el colegio San Pablo CEU, en Madrid,
lo que me abrió las puertas a equipos como el Estudiantes,
el Real Madrid e incluso la Selección Española, con la que
gané medallas en competiciones europeas y mundiales.
Desde muy joven he experimentado el deporte de alto nivel,
llegando incluso a recibir una beca en el NCAA (Big East) de USA,
midiéndome con leyendas como Allen Iverson o Ray Allen y
compitiendo en ligas profesionales en España, Francia y la ACB.
La interrupción
Una importante lesión en el tendón de Aquiles con tan solo 23 años
puso fin a una prometedora carrera casi antes de que comenzará.
Pero en el deporte, como en la vida, hay que evaluar las opciones y buscar el futuro.
Fueron dos operaciones quirúrgicas y 17 meses de recuperación
los que me permitieron salir de nuevo a la pista y seguir disfrutando de mi pasión varios años más.
Otro revés inesperado
Es en 2008 cuando decido retirarme del deporte profesional, pero también
el año en el sufro una depresión derivada de enfrentarme a un camino
que no conozco y para el que nadie me había preparado.
Es el momento en el que me centro en el cuidado emocional,
me apoyo en la terapia y presto atención a todo el trabajo
personal profundo que puedo aportar para salir de ahí.
Y todo esto es lo que da forma a quien soy hoy.
En primera persona
Hoy, hago orgulloso acopio de todas mis experiencias,
las buenas y malas y las del deportista y la persona
para acompañar a otros en su vida y carrera.
En los últimos años me he formado en el territorio del coaching y
las emociones y ahora uno eso con el mundo que mejor conozco, el del deporte.
Acompaño a las personas en el entrenamiento ya no del cuerpo,
sino de las emociones, del bienestar y, sobre todo, del respeto
y de todo lo que implica vivirlo como guía.